TÁCTICA DEFENSIVA GENERAL
En un equipo de fútbol los once jugadores tienen un papel defensivo, aunque haya especialistas en defensa. El papel que se le asigna a cada jugador depende de la táctica. En principio, hay dos formas de defender: la defensa en zona y la defensa hombre a hombre. En una defensa en zona, los jugadores defensivos se mueven ajustando sus posiciones de forma conjunta, mientras que en una defensa hombre a hombre los movimientos se ajustan a las posiciones de los jugadores contrarios. También es posible asignarle la defensa hombre a hombre a uno o dos jugadores, mientras el resto del equipo defiende en zona. Actualmente la defensa más utilizada es la de zona, y sólo se defiende al hombre a ciertos jugadores de gran calidad.
TÁCTICAS DEFENSIVAS - PRIMERO, SEGUNDO Y TERCER DEFENSA
El primer defensa tiene la principal responsabilidad sobre el oponente que tienen la posesión, buscando obstruir los pases peligrosos. Los primeros segundos después de que el equipo con la posesión ha perdido el balón son muy importantes ya que tendrá su línea defensiva desorganizada. Una buena organización defensiva consiste en organizar rápidamente la defensa antes de que los oponentes puedan atacar. El primer defensa debería ser el jugador más cercano al oponente que tiene la posesión, pero siempre que éste se encuentre en su zona de influencia. Debe mantener una distancia de aproximadamente dos metros, aunque la distancia ideal variará en cada situación. La cuestión es presionar al oponente tanto como sea posible sin darle oportunidad de regatear. Cuando el jugador con la posesión no es un buen regateador, la distancia defensiva puede ser más corta. En ciertos casos, el defensa debería intentar una entrada. A menudo, sin embargo, esto aumentará la probabilidad de ser regateado y pasado.
El segundo defensa tiene el papel de cubrir la posición si el atacante logra regatear al primer defensa. En ese caso, toma el papel de primer defensor, e idealmente uno de los terceros defensas se posiciona como segundo defensor. El equipo debería ser organizado de manera que se produzca esta transición tan rápido como sea posible. La distancia ideal entre el primer y segundo defensa es aproximadamente seis metros, pero esto variará mucho dependiendo de la situación. El factor más importante es la velocidad del oponente; si se está moviendo de forma veloz, la distancia debería ser más larga, mientras que si todavía se encuentra estático, el primero y segundo defensa pueden unir sus fuerzas.
Aunque el papel del primer y segundo defensa es muy similar, el de los terceros defensas es bastante diferente en la defensa en zona y la defensa hombre a hombre. Su organización también variará dependiendo de la formación.
TÁCTICAS DEFENSIVAS - LÍNEAS DE PRESIÓN EN DEFENSA DE ZONA
En la defensa de zona, los defensores y los centrocampistas se organizan en dos líneas en dirección transversal al campo, formando así una línea defensiva y una línea de centrocampo, actuando ésta última como un "escudo exterior" para los defensas. Las líneas deben ser tan rectas como sea posible, aunque el primer defensa y, en algunos casos, el segundo, pueden acudir rápidamente a presionar al contrario que tiene el balón. Una línea recta de defensores puede prevenir espacios detrás de ellos debido a la regla del fuera de juego. Sin embargo, incluso en una defensa de zona, algunos contrarios (por ejemplo los que se mueven en espacios peligrosos) pueden ser marcados temporalmente. La ideología de la defensa hombre a hombre mantiene que casi todos los oponentes deben ser marcados todo el tiempo, aunque generalmente también consideran la zona y sitúan un líbero que tiene un papel libre en la defensa. En la práctica, sin embargo, toda defensa será una mezcla de defensa de zona y defensa hombre a hombre, aunque a menudo con fuertes desviaciones hacia una u otra.
El número de jugadores en las línea defensiva y de centrocampo depende de la formación utilizada. Algunas formaciones usan un centrocampista ancla para frenar los ataques entre ambas líneas. Los atacantes generalmente también juegan un papel en la presión a los defensores, de forma que tengan menos tiempo para encontrar buenas alternativas de pase.
Las líneas deben bascular de lado a lado dependiendo de dónde se encuentre el balón. Los terceros defensores deberían mantener una distancia apreciable entre ellos, según sea la distancia a la que están distribuidos los jugadores de ataque.
Consideraciones de profundidad
La distancia entre la línea defensiva y de centrocampo debe mantenerse constante en aproximadamente 15 metros. Sin embargo, la línea defensiva debe aumentar esta distancia cuando no hay presión sobre el oponente en posesión del balón. Cuando existe una fuerte presión sobre el oponente, la distancia puede reducirse por debajo de los 15 metros. También, cuando los contrarios se mueven en las cercanías del área de penalti, el equipo defensor se verá forzado a mover a sus centrocampistas a esas zonas.
Cuando está organizado, el equipo defensor no ofrecerá resistencia hasta que el equipo atacante haya avanzado a una cierta altura en el campo. La altura de presión, es decir, la profundidad a la que los centrocampistas y delanteros deberían empezar a defender, depende de muchos factores. Cuanta más presión, más se cansarán los jugadores, por lo que es necesario una buena resistencia física. En general, un equipo con mentalidad defensiva tiende a presionar más abajo, disminuyendo los riesgos defensivos ya que los oponentes tienen menos espacios; esto, sin embargo, también produce que tengan más campo que recorrer hasta la portería en caso de un robo de balón y posterior contraataque. La alternativa a este inconviente suele ser el balón largo.
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